Puede que en muchas culturas las cosas no sean como en la española, puede que sean mejores, o puede que peores, todo depende del tema tratado y el punto de vista con el que se miren las cosas. A los españoles les gusta salir de casa, hacer vida en la calle y relacionarse con otras personas. Pero evidentemente, también pasan tiempo en sus casas y cuando no están durmiendo en sus camas o sentados comiendo, están sentados o tumbados en el imprescindible para la mayoría, sofá. Y es que, los sofás son en muchos hogares una pieza fundamental, lugar de tertulias y reuniones con familia y amigos, es por ello que elegir las piezas adecuadas no será tarea sencilla, y encontrar además sofás nuevos y baratos, ya ni hablar.
Pero, ¿en qué se debe uno fijar para encontrar un sofá que sea para toda la vida?
Aunque algunos no lo crean es posible encontrar en el mercado sofás nuevos y baratos de gran calidad, que soporten el paso del tiempo igual que aquellos que doblan su precio, y que proporcionen la comodidad que estos imprescindibles han de tener. Pero para ello, no basta con ir un día a un único establecimiento y probar tres o cuatro modelos, no. Encontrar un sofá para toda la vida requiere de tiempo y de probar y probar hasta dar con ese del que uno ya no se querrá levantar. Podríamos decir, que se trata de una experiencia similar, salvando las distancias, a encontrar el vestido de novia que se estaba buscando.
Así que, lo primero que uno debe hacer es armarse de paciencia y lo segundo tener claras las dimensiones que debe manejar. A partir de ahí todo se resume en prueba y error, es decir, sentarse en uno y valorar la estructura, la comodidad y demás elementos fundamentales, por supuesto, si se trata de una renovación, se debe tener siempre presente que formará parte de un todo que ya se posee por lo que se debe prestar especial atención al tapizado que posee para estar seguros de que no desentonará.
Los tres elementos que garantizarán una mayor durabilidad de un sofá son:
- Que tenga una estructura de madera maciza o metálica.
- Que cuente con un sistema de muelles o de cinchas en zigzag que aguante de los cojines.
- Que las patas formen parte de la propia estructura del sofá.
Y ahora que ya se conoce todo sobre los sofás, es hora de comenzar la aventura.