Se estima que el mercado de los drones crecerá hasta un 30% en los próximos 3 años. Estos artículos están de moda este verano, gracias en parte a su facilidad de uso y a sus óptimos resultados. Este hobby cada vez tiene más adeptos y no solo entre los más jóvenes, sino que son muchos los adultos que han encontrado en este tipo de artículos un entretenimiento y una original manera de registrar aquello que ven.

Normalmente los drones se dividen en dos categorías. Los primeros son los drones de iniciación, perfectos para niños, jóvenes y adultos. Son muy fáciles de volar y cuentan con numerosas opciones para principiantes como el control de altura o el auto-retorno, que permite que el drone vuelva al punto de partida (algo muy importante cuando estás aprendiendo a volar). Además, muchos de ellos ya cuentan con cámaras con las que poder grabar y hacer fotos, e incluso otros soportan cámaras externas como la GoPro.

Se pueden encontrar diversos modelos, según las necesidades que se quiera cubrir y el presupuesto con el que se cuente. Hay minidrones, con los que podrás volar en interiores sin peligro alguno y que son ideales para que los más pequeños se inicien en este hobby. Estos modelos son además muy asequibles económicamente, una ventaja a la hora de aprender a pilotar un drone desde cero. Algunos caben hasta en un bolsillo.

También hay drones un poco más grandes, que permiten mejorar las habilidades de vuelo y probar algunas acrobacias, aunque todavía se consideren drones de iniciación. Son drones baratos y la relación calidad – precio es increíble, además de ser bastante resistentes a los golpes. Muchos de ellos cuentan con cámara y algunos hasta soportan equipos FPV (First Person View). Uno de los modelos que más nos gusta es el SYMA X8HC, no solo por su diseño elegante y sofisticado, sino porque además de incluir todas las funciones básicas de los drones de iniciación, su cámara se puede cambiar por una GoPro y su precio es realmente competitivo. Es un modelo de drone mediano resistente y ofrece una gran estabilidad de vuelo. Incluso se puede volar de noche gracias al sistema de luces LED que trae incorporado.

Para aquellos que son apasionados de la fotografía y buscan un buen drone con el que poder filmar y fotografiar con calidad óptima también hay drones con cámara para todos los gustos. Hay de distintos tamaños, que engloban desde minidrones como el Cheerson CX10, hasta cuadricópteros más grandes y con más prestaciones como el Wltoys V666, que ofrece una estabilidad enorme y es perfecto para iniciarse en el vuelo de drones y las grabaciones aéreas. La elección de este tipo de aparatos también dependerá del tipo de grabaciones o fotografías que se quiera tomar. Podemos encontrar desde cámaras de 2 megapíxeles hasta cámaras de alta resolución con las que se podrán realizar tomas increíbles, como es el caso del Yuneec Breeze 4K. Por lo que tomarse su tiempo para elegir y pedir consejo a los especialistas es básico a la hora de elegir un drone con cámara, porque dependiendo de las necesidades que se tengan se tendrá que seleccionar un drone u otro.

Lo bueno de estos aparatos es que están pensados para gente que se inicia en este hobby por lo que, a pesar de llevar incorporados una cámara, suelen ser aparatos muy resistentes a los golpes, muchos de ellos con las hélices reforzadas. Todas estas prestaciones permiten volar el drone sin miedo a romperlo mientras grabamos o entrenamos.

También se pueden elegir equipos que permitan Sistemas FPV. Estos sistemas son los conocidos “First Person View”, y te ofrecen una transmisión de directo desde la cámara de tu drone hasta la pantalla asociada, ya sea un smartphone o una Tablet. Muchos de estos equipos incluyen además Gafas FPV con las que se puede ver en directo y en primera persona lo que tu drone está grabando como si fueras él.

Por esto y por mucho más, son miles las personas, adultas y jóvenes, que se están adentrando en este fascinante mundo. Ya sea para pasar el tiempo con la familia y los amigos, para poder disfrutar de la naturaleza grabando en exteriores o para tomar fotografías aéreas imposibles, los drones han llegado para quedarse.