Macpherson nos señala este articulo que nos invita a leer con detalle:
La imagen tradicional del jefe como un ser temible, hombres de puertas cerradas, inaccesible y prácticamente anónimo para el común de los mortales, es un personaje en vías de extinción. Los jefes de comienzo de siglo prefieren ser identificados como los líderes naturales de una empresa más que por sus cargos de gerentes o directores.
Los estilos gerenciales recorrieron un largo camino hasta llegar al ejecutivo último modelo. Las causas que llevaron a esta necesidad de cambio son varias: mercados globalizados, nuevas estructurasen las organizaciones, mayor complejidad en los negocios, creciente incertidumbre y turbulencia del entorno, aumento notable de la competencia, demanda cada vez más exigente y selectiva, aumento en el catálogo de los productos ofertados por las empresas, utilización de la calidad como estrategia competitiva, etc.
Los teóricos de la conducción empresarial y los propios interesados coinciden en que las exigencias que tienen los nuevos jefes son mucho más complejas que las que tuvieron sus pares años atrás. Lo antiguo es el jefe autocrático, autoritario, aislacionista, no motivador. Lo nuevo es el coach, el incentivador, el que baja al nivel de un par más en su equipo. El líder es el que trabaja en equipo, no orientado a su autoridad sino al logro de los objetivos.
Precisamente el trabajo en equipo es una sana costumbre que sí o sí deberían tener todos los líderes de hoy. El líder recurre a sus colaboradores los reúne, los consulta y las decisiones se toman en conjunto, más allá que el responsable final siempre sea el líder.
El exitoso modelo implementado por las empresas japonesas, poco amantes de las decisiones individuales y de los liderazgos a ultranza, o de compañías hipercompetitivas como Microsoft, sirvió de ejemplo para numerosas organizaciones que, enfrentadas a un mercado muy dinámico, vieron la necesidad de revisar su estructura de jerarquías.
Microsoft es una caso de organización jerárquica simplificada: entre el puesto de gerente general de la Argentina y Bill Gates hay sólo cuatro posiciones.
La pirámide achatada favorece el diálogo, un arte que todo gerente que se precie de moderno debe cultivar con esmero.
En medio de estas nuevas circunstancias, todo el mundo trata de construir la organización ideal, generalmente plana, con pocos niveles jerárquicos y orientada directamente a satisfacer al cliente/consumidor.
Las características del líder de hoy se basan, fundamentalmente, en el manejo de la comunicación dentro de la empresa. A través de ella no sólo podrá motivar, integrar y delegar sino que también contribuirá al desarrollo de los recursos humanos, del trabajo en equipo y de los productos y servicios.
El que ejerce el mando en una organización debe ser consciente de que la información gira libremente, no está escondida, y esto permite que las ideas y la toma de decisiones surjan en ámbitos muy distintos. En un mercado supercompetitivo necesitamos nutrirnos de la creatividad de cada persona de la organización. Hoy lo que se observa en las organizaciones es que la información está sustituyendo a la autoridad.
Algunos definen al líder de hoy como un agente de cambio, el que puede convertir la turbulencia en una oportunidad. Quizás haya que llamarlo directivo más que ejecutivo. Porque el ejecutivo está más cerca de hacer o enseñar a hacer y el directivo es alguien que enseña, acompaña, motiva y lidera.
Llegó el tiempo de la mejora continuada. En una economía con mercados muy competitivos, no hay posiciones fijas de liderazgos, no hay ventajas permanentes, es necesaria la mejora continuada, que es el permanente crecimiento, el aprendizaje. La capacitación es la clave para formar a los nuevos líderes de puertas abiertas que deberán estar preparados para sacar lo mejor de sus colaboradores y provocar en ellos la fluidez de ideas.
Hay que diferenciar entre liderazgo y administración. Esto último es ordenar, controlar, poner límites, que es lo que se venía haciendo. En cambio el liderazgo implica movimiento, tener una noción clara del futuro, comunicar, motivar y fijar objetivos para la gente.
Los jefes autoritarios, paternalistas y poco amigos del diálogo ya fueron. El antiguo modelo va dejando paso al nuevo líder, que es cada vez más buscado en las organizaciones modernas.
Jefes: ayer y hoy
ESTILO ANTERIOR | ESTILO ACTUAL |
Gerente | Líder |
Jefe | Entrenador |
Controlar | Delegar |
Centralizar | Descentralizar |
Dar órdenes | Orientar |
Centrado en cifras | Centrado en calidad |
Confrontar | Colaborar |
Resistencia a los cambios | Aprendizaje permanente |
Centrado en mercados nacionales | Centrado en el mundo |
Enfoque de corto plazo | Visión de más largo plazo |
Por todos estos rasgos del cambio, las empresas piden hoy más que nunca que los sistemas contables sean capaces de suministrar información adecuada para abordar cuestiones nuevas y complejas. En esta línea se encuentran las nuevas técnicas de gestión, pudiendo destacarse las siguientes:
- Determinación y gestión de los costos mediante sistemas basados en el seguimiento de las actividades que se ejecutan en las empresas, método en el que centra su análisis (Modelo ABC-Activity-Based Costing).n
- Con base en el punto anterior, ha aparecido el ABM (ACTIVITY BASED MANAGEMENT), que aprovecha la información brindada por el modelo ABC. El ABM se utiliza para gestionar adecuadamente los costos, mediante la consecución de una mejora continuada en la realización de las actividades.n
- Ampliación de las herramientas dentro de las nuevas técnicas de gestión hacia la vertiente estratégica de la empresa. Atento a que el ABM puede ser utilizado para adoptar decisiones estratégicas adecuadas, entendiendo éstas como las de largo plazo relacionadas con los objetivos de la empresa y tratando de mejorar las condiciones competitivas.n
- Gestión de los costos relacionados con el ciclo de vida de los productos, atento a la limitada duración en el tiempo de los productos y servicios.n
- Sistemas de fabricación flexibles del tipo JUST IN TIME. Busca producir sólo lo que se necesita, en el momento que se requiera y en las cantidades necesarias, reduciendo de esta forma los niveles de stock, tanto de materiales como de productos terminados. El objetivo de este concepto de producción es lograr significativos ahorros en los costos e incrementar la producción.n
- Gestión de la calidad total para alcanzar la mejora continuada, con cero defectos, centrada en el cliente (seducción, satisfacción y compromiso). Dentro de esta técnica, podemos citar JIDOKAcomo la habilidad de cada equipo o de cada operario para parar toda la línea de producción cuando ocurra una falla.n
- KAIZEN, el cual busca la forma de mejorar los procesos y, una vez mejorados, hacerlos aún mejor. Las principales formas del proceso KAIZAN son el "sistema de sugerencias" y los "círculos de calidad".n