Los conductores nos vemos muchas veces sorprendidos por alguna carta de tráfico, en la que nos han multado por haber cometido alguna infracción de la que ni siquiera hemos sido conscientes. En este artículo hablaremos de las infracciones de tráfico que solemos cometer con más asiduidad… ¡Presta atención y evita cometerlas!, podrías verte sorprendido con alguna sanción e incluso con alguna retirada de los puntos de tu carnet.

¿Cuáles son las Infracciones al volante más comunes?

1. El mantenimiento del vehículo. Por descuido, falta de dinero o falta de tiempo hay veces que no tenemos el vehículo en las condiciones necesarias para circular. Un espejo que falta, una luz fundida, las gomas de las ruedas en mal estado… pequeños detalles que nos puede costar una multa además de poner en peligro la conducción.

2. Cinturón y tipo de sujeción. Es una de las infracciones más comunes, siendo casi siempre infringida dentro de la ciudad o los pueblos. Cuando vamos por carretera somos más conscientes de que debemos de poner el cinturón, sin embargo por comodidad y falta de tiempo cuando nos movemos en trayectos cortos solemos descuidar esto.

 Incluso cuando se trata de nuestros propios hijos, solemos abrir la puerta del coche y dejarles entrar sin ponerles los cinturones de la forma correcta.  A veces incluso descuidamos el tipo de silla o sillón elevador que debe de llevar. Lo mismo ocurre con nuestros animales. Saber cómo viajar con mascotas correctamente será fundamental, utilizando el trasportín adecuado y los cinturones de seguridad requeridos.

3. No utilizar el casco. Otro fallo cometido  por los conductores de motocicletas es descuidar el uso del casco dentro de la ciudad, muchos de los accidentes que se dan dentro de la ciudad y los afectados no llevan casco puede resultar peligroso para los conductores y tener lesiones muy graves. 

4. Sobrepasar la velocidad. Donde más solemos sobrepasar el límite de velocidad permitida suele ser en las carreteras convencionales, nos confiamos, conocemos el trayecto y no lo respetamos, lo que es un peligro para nosotros y para el resto de vehículos con los que podríamos colisionar.

5. Uso del móvil. Por culpa de las tecnologías y lo enganchados que estamos a estar constantemente en contacto con los demás, los conductores solemos mirar de vez en cuando el móvil en los trayectos largos. Esto puede distraernos y hacer que tengamos un accidente que puede resultar mortal dependiendo del tipo de colisión o impacto.

6. El consumo de alcohol. Seguimos sin ser del todo conscientes del peligro que conlleva coger un vehículo en un estado de embriaguez.  Evidentemente una persona con unas dosis de alcohol elevadas puede ser un kamikaze en plena carretera, poniendo gravemente en peligro la vida no solo suya sino también de muchas otras personas con las que su vehículo pueda cruzarse. Cuando salimos, solemos tomar vino, cerveza o alguna copa, pensando que no va a dar positivo y que si cortamos a tiempo no nos tiene por qué afectar a la hora de conducir. Esto no es del todo cierto, una persona que ha ingerido alcohol aunque espere un tiempo prudencial antes de coger el coche no está del todo en sus capacidades para conducir. Será más fácil que se duerma al volante o que incluso tenga algún despiste ocasionado por el alcohol en el cuerpo.

Intenta ser un buen conductor, no cometas infracciones que resulten peligrosas para todos, se un conductor responsable. ¡De ti depende ser un conductor de primera! Si necesitas más consejos, puedes ver este artículo sobre cómo mejorar la conducción.