La productividad, en términos económicos, se define como la relación entre producción y medios empleados. Desde el punto de vista empresarial, el rendimiento de trabajo de los empleados está ganando importancia como variable directa que afecta a la productividad. De hecho, se están implementando medidas que favorecen cada vez más al bienestar del personal y a la conciliación de su vida profesional y personal, para que aumente su estado de ánimo y la productividad se vea, en ocasiones, hasta triplicada.
Como sabrás, algunos estados de Estados Unidos, así como países nórdicos y centroeuropeos han implementado medidas para favorecer a sus empleados. Por ejemplo, el 43% de los Estados de América han apostado por la semana laboral de 4 días, dando día libre los viernes, sábados y domingo. Como consecuencia, se ha duplicado la productividad en dichas empresas.
7 factores clave para crear oficinas productivas
>Según diferentes
estudios realizados por equipos de Recursos Humanos y verificados en empresas que lo han implementado, enumeramos 7 claves para ganar en productividad y mejorar las oficinas de cualquier empresa:
Luz
>La luz natural fomenta la concentración de los trabajadores. Los ambientes con iluminación artificial generan la
sensación de nocturnidad en el cerebro, por tanto el trabajador se encuentra más cansado. Apuesta por oficinas con ventanas y luminosidad y coloca las mesas cerca de los ventanales.
Ergonomía
>Este aspecto de la decoración se centra en
ajustar los espacios laborales de forma que se reduzcan riesgos asociados al tipo de actividad laboral: malas posturas, movilidad reducida, señalizaciones, etc. Un ambiente laboral peligroso causa estrés, ansiedad y falta de seguridad en el trabajador, lo que le hace estar más pendiente a no hacerse daño que a trabajar.
Oficinas productivas: regula la temperatura
>Mantén una tempertura regular en la oficina. Ni mucho frío en verano, ni mucha calefacción en invierno. Lo ideal,
ajustar los grados para que siempre estemos a la misma temperatura. Limpieza
>Parece obvio que hay que
mantener limpios los espacios de trabajo, pero a veces no sabemos cómo. Establece una serie de normas cívicas para que, durante la jornada laboral, los empleados mantengan el orden y la limpieza (recogiendo la mesa, fregando las tazas, reponiendo el papel higiénico, etc.). Luego, puedes optar por contratar un servicio de
limpieza oficinas, pero intenta que acudan a limpiar cuando el personal se haya ido. Es incómodo para un trabajador tener a una persona limpiando al lado y así también
evitamos entorpecer el trabajo del limpiador.
Ruidos
>Un factor de insatisfacción relevante entre los trabajadores es la exposición a ruidos externos desagradables. Obras, tráfico, vecinos o incluso compañeros de trabajo charlatanes.
Habilita zonas insonorizadas para que el trabajador que se sienta agotado por la contaminación acústica encuentre un espacio de silencio.
Cromatismos
>Hay toda una psicología de colores que se dedica a analizar el efecto del color en las percepciones sensoriales de los trabajadores. Apostar por uno u otro color para
pintar las oficinas generará efectos óptimos y diversos en el personal (alegría, optimismo, armonía, concentración, calidez, relajación, entre otros). Por ejemplo,
el rojo facilita la toma de decisiones y la resolución de problemas, por lo que puede ser ideal para pintar la sala de reuniones.
Distribución de puestos y mobiliario
>Aquí evocamos un poco la filosofía feng-shui para distribuir los espacios de trabajo y áreas de descanso, así como lugares de interacción entre empleados. A veces, dependiendo de la empresa,
las áreas de trabajo sin divisiones fomentan la comunicación y aumentan la productividad.