La educación infantil es un asunto que abarca muchas fases. Sin embargo, una de las más importantes se relaciona con el modo en que nuestros pequeños aprenden desde muy temprana edad a usar el baño correctamente. De hecho, una buena educación en este sentido junto a una buena alimentación y un sano estilo de vida se presenta como un marco ideal de prevención contra patologías como las hemorroides o el estreñimiento. Si actualmente te encuentras en aquella particular fase en la cual le estás enseñando a tu niño o niña a usar el baño para defecar, he aquí tres trucos que te ayudarán en dicho proceso.
1. Elimina el pañal de raíz
Uno de los grandes errores que cometen muchos padres durante este proceso radica en que a la primera dificultad optan por volver a poner el pañal al pequeño. Se trata de un error grande que crea gran confusión entre los niños. Por este motivo, en el momento que veas que tu hijo está listo para aprender y decides comenzar el proceso, debes olvidarte por completo del pañal.
2. Habla y comunica
Si creas que los niños pequeños no elaboran reflexiones profundas sobre lo que les dices, te equivocas. Los niños pequeños no solo piensan en lo que les dices sino que también te ven como un punto de referencia al que se agarran de manera espontánea y sincera. Por esta razón, es muy importante que les expliques el por qué debe usar el baño para hacer popó. Puedes ayudarte con libros o inclusive con videos como, por ejemplo, este simpático vídeo japonés.
3. Utiliza juegos con premios
Considerando que este proceso puede generar rechazo, una buena fórmula para que funcione desde el principio consiste en hacer de este algo divertido. Por ejemplo, puedes decorar el baño con imágenes de su personaje preferido o utilizar un juego basado en premios que le permita al niño o niña ganar un premio cada vez que hace pipí o popó en el baño. A este respecto, uno de los juegos más populares consiste en dar un sticker al niño con la imagen de un muñeco que le guste cada vez que ha hecho un buen uso en el baño. Premiar el esfuerzo es fundamental.
Como puedes ver, no debes hacer grandes esfuerzos para portar este proceso a buen fin. Si pones en acción estos trucos y añades un poco de paciencia y mucho amor, los resultados llegarán cuando menos te lo esperes.